jueves, 26 de julio de 2012

Vía Ferrata del Desfiladero de la Hermida

Hola de nuevo!!!

El fin de semana pasado hicimos nuestra primera vía ferrata, para probar la experiencia y el material.

La más cercana de Valladolid es la Vía Ferrata de la Hermida, podéis entrar en su página web clicando AQUÍ. Está en la comarca del Saja-Nansa en Cantabria.

Es una ferrata pequeña con varias salidas a distintas alturas, lo que se adecua a distintos niveles y edades.


Esta primera imagen es de antes de incorporar los puentes a la vía... y la siguiente de después, en la que se aprecia un itinerario intermedio, que fue el que elegimos, dado que por el largo te los pierdes... y son la novedad ( y lo que más miedito da... jajaja).


Allí puedes alquilar el material necesario, obligatorio arnés, disipador y casco, pero yo recomendaría encarecidamente guantes también, y unas botas de montaña ligeras, mejor que unas Converse... :)


Es una actividad súper divertida, pero no es un juego, un traspiés y el susto es enorme, si no es peor...


Tiene una primera parte de escalada en escalera fácil, la segunda es bastante más larga, pero igualmente divertida,


la tercera se complica, sobre todo a la salida con un giro en la dirección de la llegada a tierra firme, que pasa el límite de la vertical, en el que comienzas a notar la fuerza de la gravedad hacia el vacío... y asusta un "poquito"...

Las cuevas son preciosas, y un lugar de descanso para respirar.



La cosa se complica en el primer puente, un puente tibetano formado por tres cables y la línea de vida, donde cuelgas el disipador que va atado al arnés, si te lo piensas dos veces no se si pasas, es mejor llegar y pegar, o por lo menos eso hice yo.

La salida de éste puente es desde mi punto de vista, la parte más difícil de todo el recorrido. Entre que vas acelerado y que la linea de la vertical la pierdes otra vez... sólo me faltó agarrarme con la boca a las piedras, pero no podía abrirla mucho, porque se me salía el corazón...

El segundo puente es más largo, pero con tablitas entre dos cables, lo que no me daba ninguna buena espina, preferí sin dudarlo el tibetano, me fío más del acero que de la madera. La salida de este segundo puente también se complica, sobre todo a mi, que no llegaba ni queriendo a soltar el disipador de la linea de vida, nos lo avisó el chico de la instalación, que soltáramos toda la cuerda posible, pero pese a eso, la linea de vida estaba tan alta, que casi me colgaban los pies del arnés y no me llegaban a las tablas del puentes, era como ir arrastrando tu peso en volandas tirando de las manos, qué agobio!!! Mi madre no me dio suficientes petit suisse... :( Tuve que esperar a Pedro para que me soltará los mosquetones, a punto estuve de subirme a los cables que hacen de pasamanos, pero cuando miré hacia atrás, Pedro ya estaba en la mitad del puente, y lo mismo se hubiera movido tanto que oís los gritos desde aquí...


El último tramo consiste en llanear por el bosque hasta salir a una carretera que te lleva de vuelta al aparcamiento.

En frente del balneario (de la Hermida), al lado del aparcamiento de la vía, hay una salida de aguas termales donde te puedes dar un baño en el río en pleno diciembre!!! El agua sale a sesenta y tantos grados!!! Una pasada!!!

Tardamos algo menos de tres horas, y nos dimos una buena comilona al terminar... Los menús en el pueblito están muy bien de precio, y compartes terraza con ciclistas, montañeros y demás excursionistas que paran allí a repostar las buenísimas alubias y el cabrales de la zona... mmmmmmm...

En un tris estás de nuevo en la playa, con un subidón de adrenalina enorme y el estómago llenito... jajaja

Quién se apunta???


jueves, 19 de julio de 2012

Play Padel

What doesn't kill you makes you stronger... Eso me digo a mi misma todas las mañanas cuando me levanto de la cama sin ganas de mucho...

Quién me iba a decir a mi que con todo el tiempo del mundo no tendría ni tiempo ni ganas para nada. Pues así es... Bueno, para casi nada.

No es fácil verte sin trabajo y sin perspectivas de encontrarlo, con una formación a las espaldas y ganas e ilusión, en serio que no.

Así que como cada uno se agarra a lo que puede, voy a contaros una de mis últimas locuras...

Hace un par de años comencé a jugar al padel, ya jugaba desde la universidad, pero ahora un poco más en serio. Me apunté a clases y poco a poco empecé a engancharme, y ahora, soy adicta!!!

Cuando me quedé sin trabajo y fui consciente del panorama real del que hasta ese momento no había sido más que una mera espectadora, las noches se me empezaron a hacer eternas... Después de largas jornadas de inactividad física y metal total, mi cuerpo no me pedía descanso, así que a las tantas de la mañana me dormía mareada de bucear en mis propios pensamientos.

Poco a poco descubrí que si llegaba a casa agotada físicamente, aunque mi cabeza estuviera intacta, mi cuerpo no soportaba el cansancio y caía rendida al acostarme, así que ni corta ni perezosa, empecé a jugar al padel todo lo que podía y más... Lo que hizo que mi lista de contactos creciera exponencialmente, casi a la vez que mi nivel de juego, de cero a tres, no os vayáis a pensar... jajaja...

Una vía de escape, como cualquier otra que se os ocurra, pero sana y social.

El que me conoce bien sabe que mis locuras suelen ir a más, no a menos, así que, cansada de molestar a la gente para jugar en momentos inoportunos, decidí hacerme con mi propia compañera de entrenamientos... Y así surgió la idea de adquirir una máquina de lanzar pelotas.

Lo primero que hice fue sondear el mercado, y lo segundo, marearme!!! Casi me da un algo!!!



La más barata rondaba los mil y pico euros, y en mi situación salarial actual, no es lógico ni pensarlo, así que sopesé la idea de comprar una maquinita llamada GoDogGo,






que como os imaginareis, es un juguete que lanza pelotas al perro, pero ante la idea del ridículo total, desistí, todavía me queda "algo" de vergüenza...

Así que comencé a buscar máquinas caseras vía internet, y aluciné. Hay artistas del bricolaje mires donde mires, y por supuesto, les hay tan frikis como yo, lo que es un consuelo.

Podría recomendar unas cuantas webs, pero no quiero resultar plasta, si a alguien interesa que me pregunte...

El caso es que había decidido fabricar mi propia máquina para lanzar pelotas de padel, y aquí está... Mi locura con ruedas (la poca vergüenza que me quedaba la voy a perder ahora mismo... porfi... que no oiga las risas desde mi casa...).


(Estructura de la máquina con las ruedas de lanzamiento acopladas a dos motores de electroventilador de coche, tubo de extracción y carrusel inicial de servicio de bolas.)



(Cambio del motor del carrusel por uno de ventanilla eléctrica, batería pequeña de coche y reguladores de potencia para los tres motores, para poder regular la periodicidad y efectos de cortado y liftado en los motores de las ruedas de lanzamiento.)



(Prueba del primer prototipo en el pinar.)



(Prototipo definitivo con protección en las esquinas, regulación de altura de lanzamiento mediante escuadras y segundo carrusel con dos agujeros, protección antiatasque de bola y cuñas de inclinación.)



Ahora, con ella a la pista...  ;)